Arquitectura Neoclásica


Neoclasicismo en la Arquitectura.

 Museo del Louvre en París, Francia | Fuente externa

 El neoclasicismo es un estilo artístico que surgió en el siglo XVIII como una reacción al excesivo ornamento y decoración del barroco y rococó. Inspirado en la arquitectura y filosofía de la antigua Grecia y Roma, el neoclasicismo buscaba recuperar la simplicidad, armonía y proporción de las formas clásicas.


Los edificios neoclásicos solían tener una apariencia simétrica y ordenada, con fachadas sobrias y elegantes. 

Algunas características de los edificios neoclásicos son:


Fachada estilo Neoclásica | Fuente Designer 

  1. Inspirados en la arquitectura clásica greco-romana, con columnas, frontones y elementos decorativos característicos de este estilo.

  2. Simetría y equilibrio en la distribución de las partes del edificio, con fachadas ordenadas y proporcionadas.

  3. Uso de materiales nobles como la piedra, el mármol y el yeso para exteriores e interiores.

  4. Decoración sobria y elegante, con detalles ornamentales refinados y simétricos.

  5. Grandes ventanales y puertas en arcos o vanos rectangulares, con balcones y remates decorativos en cornisas.

  6. Diseño de espacios interiores amplios y luminosos, con techos altos y elementos arquitectónicos que resaltan la verticalidad y la amplitud.

  7. Predominio de líneas rectas y formas geométricas simples, evitando la ornamentación excesiva y los detalles recargados.

  8. Utilización de elementos clásicos como frontones, columnas corintias o jónicas, frisos con motivos geométricos o florales, y pilastras en la decoración arquitectónica.


El Panteón de París, Francia | Fuente Pexels

Uno de los principales arquitectos neoclásicos fue el francés Jacques-Germain Soufflot, quien diseñó la iglesia de Sainte-Geneviève en París, conocida como el Panteón. Esta obra maestra del neoclasicismo se caracteriza por su imponente cúpula y su fachada inspirada en el Partenón de Atenas.  





El Capitolio en Washington | Fuente Pexels

Otro arquitecto neoclásico lo fue William  Thornton quien en 1793 diseñó el Capitolio  de Washington. Este imponente edificio combina elementos clásicos como columnas corintias, frontones y frisos esculpidos con una planta simétrica y proporciones armoniosas. 


Otros ejemplos de edificios neoclásicos famosos incluyen El Palacio de Buckingham en Londres, Reino Unido, La Casa Blanca en Washington D.C., Estados Unidos, El Museo del Louvre en París, Francia

El neoclasicismo tuvo un gran impacto en la arquitectura de la época, influyendo en la construcción de palacios, iglesias, teatros y edificios públicos en toda Europa y América. Este estilo se asociaba con los valores de la Ilustración, como la razón, la libertad y la democracia, y se consideraba un reflejo de la estabilidad y el orden de la sociedad.


El  neoclasicismo fue un estilo arquitectónico que se caracterizaba por su apego a los principios clásicos de la antigüedad, su simplicidad y elegancia. Aunque fue una reacción al exceso del barroco y rococó, el neoclasicismo logró crear obras maestras que han perdurado a lo largo de los siglos y han influido en la arquitectura hasta la actualidad.